Hubo un tiempo (hace tiempo) en que llegué a memorizar la canción. Ahora apenas el estribillo, avec le temps, on n’aime plus…Gracias por este recuerdo.
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Joooo…Eso no se hace, Luisa.Que yo todo eso lo repaso a horas tempranas con la guardia bajada:»De l`aube claire jusqu`à la fin du jourJe t`aime encore tu sais je t`aimeMoi, je sais tous tes sortilègesTu sais tous mes envoûtementsTu m`as gardé de pièges en piègesJe t`ai perdue de temps en temps»Un golpe bajo en toda regla.Gracias mil.Besos.
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Preciosa canción para un viernes de resaca.
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He de confesar que lo que he oído de él me ha gustado, pero no le he dedicado demasiado tiempo. Pena.Este es un temazo.Besos
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Bel, me agrada compartirlo, el recuerdo, digo. ¿Recibiste mis varios mails desde distintas direcciones? ya no sé.. te dejo aquí esta otra cuenta: lminana@gmail.comBesos——————Ybris, guapo, hay cosas que son inevitables. Aunque no la hubiera puesto en este blog, la canción da vueltas y vueltas y algún día aparece. Coincido contigo en la estrofa, es así.Un abrazo y un beso.————————-Lamia, si la oyes varias veces, adios resaca.. te lo garantizo.———————-Es un temazo. Así es, mi querido Sir. Pero Brel sabía aún más que ésto que dice en esta canción. Y hay algunas otras bellísimas. Escucha, escucha por ahí…Besotes, rey.
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Pedazo de canción querida…. aunque para mi Brel es sobre todo «Ne me quitte pas». Me parece la canción más dura y hermosa sobre el amor que se ha escrito.Besicos.
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Luisa:Ayer te mandé la información a las nuevas direcciones. ¡¡¿¿No la has recibido??!! Si es así, confírmamelo y pensaré otra solución (creo que ya la tengo).Un abrazo.
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Preciosa…(….) y en ese paréntesis, todo lo demás.Besos.
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Me gusta muchísimo Brel. A veces voy con sus discos de casa a la oficina, por si me entra el mono. No me canso de escucharle nunca. Hace treinta y cinco años que le descubrí: A los 17 ya me había hecho con su discografía completa en vinilo. Todavía los conservo, bastante gastados por roce de la aguja de mi viejo Cosmo anaranjado.¡Un beso Luisa!
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No me descubras toda tu sabiduría, Antonio… ¡que yo soy muy aprovechada! Brel es grande, desde luego, más que grande, esencial.¡Madre mía, los vinilos y los cosmos: el mío era blanco y azul.Un beso, guapo.
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